2010-12-31

2010: agur

Poco a poco se nos ha ido consumiendo este año que hoy acaba. Pasa como con la cerveza: se presenta muy bonita, se comienza con ganas y se va apurando hasta el último sorbo, esperando que deje una buena sensación en la boca tras haberla bebido. ¡Ojala haya sido así para todos!.


El caso es que ayer nos fuimos a dar la última vuelta del año por el pueblo. Fuimos al Satistegi (la última tostada del año), coincidimos con la inauguración de la bodeguilla Caza ( ya volveremos y os contaremos) que en una primera toma de contacto parece estar bastante bien, y terminamos con un crianza y un pintxo de tortilla en el Sustrai. Para acabar el año no está mal..

Que el nuevo año sea, al menos, como éste que acaba.

2010-12-23

Eguberri on!

Pues eso, que todos aquellos que nos leéis ( y los que no también) lo paséis lo mejor posible y todo eso.
Y... si la digestión es un poco pesada siempre podéis intentarlo con un poquito de Fernet después del café (el orujo gallego o de la zona que a cada cual le guste también vale, pero tiene menos "misterio").
Zorionak!!!

2010-12-20

En Bilbao de nuevo


Ya estamos en plenas fechas navideñas, vacaciones, euforia, luces, árboles, villancicos, PIN, regalos, compras, mas compras...y comidas, muchas comidas. Con los compañeros/as del trabajo, con las amistades y con la familia. Los segundos ya nos hemos reunido para celebrarlo en Bilbao.
Después de un paseo por las Siete Calles y de ver el ambiente en el mercado de la Ribera, comimos en el restaurante Harrobia, en plena calle del Perro. Menú especial del día sabroso con un poco de todo para elegir y bien de precio. Los licores en una terraza al aire libre (eso si, con infrarrojos) . A media tarde un pintxo en el Marakay (rico de verdad, bonito y antxoa y jamón con pimiento verde) y, ya puestos, terminamos cenando en El Gallinero. ¡Y esto solo es el comienzo!
Por cierto, Bilbao esta precioso en esta fechas, merece la pena pasearlo.

2010-12-19

Lerma: la ciudad donde reinó un no rey

De vuelta a casa realizamos una parada en Lerma. No dista mucho de la autopista y queda a medio camino, lo justo para poder visitarla y comer. En el Ayuntamiento hacen visitas guiadas interesantes, hay bastantes restaurantes donde comer buen cordero, tiendas con los productos de la tierra (morcillitas, quesos etc) y un convento de monjas Clarisas (las más jóvenes de todo el país) que ofrece dulces hechos por ellas mismas.
Recomendamos encarecidamente el mesón "Casa Antón", donde reservas la comida pero no la mesa. En tan concurrido sitio, siempre con colas, según te sientas ya tienes sobre la mesa el cordero y la ensalada. Deliciosos.


Madrid, Madrid, Madrid...


A ritmo de chotis os dejamos con algunas fotografías de nuestra visita a Madrid en vísperas de Navidad, con su decoración, ambiente, luces, mercadillos y demás...de día y de noche. Hemos recorrido lugares ya conocidos (El Rastro, la Plaza Mayor...) y sitios nuevos, ( el barrio de la Morería, el bonito Mercado de San Miguel...), comido cañas, tapas y fritos variados (la de bacalao del bar Revuelta excelente y los champis del "mesón del champi" también) , visitado la maravillosa colección de Rubens en el Prado ( y repasado Goya, Velázquez...) y disfrutado de la noche en buenos restaurantes ya mencionados.
Y todo un símbolo que habíamos reservado para el final: las porras.




Alcala de Henares: Cervantes y jamón

Alcalá de Henares, a pocos kilometros de Madrid capital, es una ciudad que merece la pena visitar por sus rincones, monumentos e historia. Aunque el día no nos fue propicio, la lluvia nos dejó hacer la visita guiada sin el paraguas. Una ciudad donde se respira el ambiente universitario y permite regresar en el tiempo a las épocas de calzas y jubones, las inocentadas y los corrales de comedias. También es la ciudad natal de Cervantes y se nota en sus calles y plazas.
Conviene reservar para comer en los muchos asadores en las inmediaciones de la calle mayor. El escogido fue el mesón "Las cuadras de Rocinante" con platos mas bien recios: patatas al alioli, oreja de cerdo, brochetas de tocino y jamón entre panes inmensos con nombres cervantinos: Rocinante, Sanchito etc. y el postre la típica costrada.
Por la tarde una café en el parador para degustar otro de sus postres típicos: las migas con chocolate. Las susodichas están fritas con aceite y, posteriormente, se le añade el chocolate a gusto.


Las migas antes y después



2010-12-18

Getxopintxo en Madrid: El Bazaar y Chueca

Dos tardes pasamos por ese barrio que, antes de ser "adquirido" por el colectivo gay era un barrio de esos que se llaman "pintoresco"o "castizo" si se quiere disfrazar lo de "no muy recomendable sobre todo a ciertas horas".
El caso es que ya no es así . Chueca se ha convertido en un barrio popular, con mucho colorido, bares, terrazas.. en fin un sitio de moda al que cualquiera puede ir sin ningún tipo de pega distinta a la que encontraría en cualquier otra zona.
En la anterior ocasión, como era verano, las calles y terrazas estaban más repletas de gente y los bares , por dentro, seguramente más vacíos. Ahora toca al revés. Es que el mal tiempo no perdona.
Pues la cosa es que nos fuimos a cenara un par de sitios: el Bazaar y el Come bien. Además estuvimos tomando una cervecita en el Diurno, una suerte de local "para todo a todas horas".
Si bien los tres sitios son recomendables, llegamos a la conclusión de que, en lo que a comer/cenar se refiere los lugares de por allí están a expensas del Bazaar. Me explico: una vez que el Bazaar llena (nada más comenzar) los que no hemos andado listos nos vamos a los sitios de los alrededores, que, si bien no están mal, no llegan a la altura del primero, ya que éste ofrece más platos, (muy bien presentados) mayor espacio y mejor precio (no es nada caro teniendo en cuenta lo que te ofrecen).
Lo dicho: el barrio merece más de una visita. Si volvemos a Madrid repetiremos.



Come bien


Bazaar


2010-12-12

Getxopintxo en Madrid: el "bocata calamares" y otras costumbres de la Villa


¿Quién no ha oído hablar del "bocata calamares"?. Curioso invento del que no pudimos (ni quisimos) librarnos. No es como para echar cohetes, pero se deja comer. Además, en el lugar al que fuimos no paraban de sacarlos, por lo cual supusimos que tendrían práctica con dicha receta. Los calamares (rabas, para entendernos) estaban tiernos y la caña que los acompañaba entraba francamente bien. Lo malo era la aglomeración de gente; parecía que regalasen los susodichos bocatas.
También tuvimos la opotunidad de comer el "Cocido madrileño". Tal vez lo preparen mejor en otros sitios, pero en el que estuvimos nos dieron una sopa aceptable pero tibia, unos garbanzos más bien tiesos y una carne ( gallina¿?, zancarrón y tocino) que estaba seca, a la par que sosa. Lo mejor fue la berza, que al menos tenía su propio sabor. En fin, con esto pasa como con el sarampión: se pasa una vez y ya está.
Algo parecido nos ocurrió con el conocido Café Gijón: esperábamos algo más. Los hemos visto mejores y... más baratos (una cerveza costaba 4.90 eurazos). No tenía nada de especial.En fin, lo dicho antes: el sarampión se pasa una vez.

San Lorenzo del Escorial

¿A Madrid se va por Valladolid? Pues este es el camino mas corto si quieres hacer una visitilla al Monasterio del Escorial antes de poner el pié en la capital. Eso es lo pensamos en ese día tan nevado que fue el primero del puente, hacer una parada en el viaje, visitar el monumento de nuevo (no era la primera vez, claro) y comer en San Lorenzo del Escorial. Para esto último y como había que conducir, dejamos de lado los restaurantes turísticos ("a la vuelta", pensamos) y optamos por un menú del día en una taberna de la calle de las Pozas, muy acogedora.
Huevos rotos, espaghettis, ensaladas y cerveza sin alcohol, que hay que ser prudentes.


2010-12-11

Getxopintxo en Madrid

Ya hacía un año y medio que no habíamos estado en la capital del Reino (porque esto - metidos en el siglo XXI ,que parece que debía ser menos antiguo, o más moderno, según se mire - es un reino aunque a veces haya equivocaciones).
Pues el caso es que, aprovechando el puente, nos fuimos hacia allí. En las próximas entregas os iremos contando cómo nos fue. De momento, y a modo de resumen, baste decir que en el camino de ida (¡vaya frío que hacía!) visitamos El Escorial; en el de vuelta, ya sin frío, le tocó el turno a Lerma y, en los días que estuvimos en Madrid , además del rastro, el Museo del Prado, la Puerta del Sol... visitamos Alcalá de Henares. Poco apoco lo iremos desgranando.
El famoso "cocidito madrileño", eso sí, se queda en famoso, porque de sabroso no le vimos nada.
De momento os dejamos con una foto de uno de los "iconos gastronómicos" de la Capi , el famoso bokata de calamares.