Con este pensamiento nos dirigimos hace poco, no importándonos el jolgorio, sino las viandas y....¡horror y pavor! Crítica negativa hay que hacer, pues, (leer con acento de "Yoda") . Las patatas bravas estaban domesticadas (refritas, blandas y con poco mejunje) , los tigres eran cachorros ( ni se veía el "bitxo"), los champis recalentados y las morcillas parecían hechas con el hueco de un macarrón de lo estrechas que eran.
Vamos a pensar que fue mala suerte y que ese preciso día el cocinero estaba de mala h...Esperemos que recupere su sabor y estilo de siempre.
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